¿Es segura la carne cultivada? Todo lo que necesitas saber sobre el informe de la FAO
Una herramienta valiosa para los responsables públicos y los actores clave del sector de la carne cultivada: aquí te contamos los aspectos más destacados del documento.
17 octubre 2024
En abril de 2023, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicaron un informe que recopila y analiza toda la evidencia disponible sobre la seguridad alimentaria de la carne cultivada.
El documento supone una contribución significativa a la creciente literatura científica sobre este tema y servirá como una herramienta clave para los países que buscan adoptar enfoques basados en evidencia para la regulación de la carne y el pescado cultivados. Hemos revisado con detenimiento las más de 140 páginas del informe para resaltar los puntos principales que pueden ser interesantes para empresas, investigadores y autoridades reguladoras.
El informe
Basado en datos recogidos en 15 países, el informe de la FAO tiene como objetivo prever y mitigar cualquier posible problema de seguridad alimentaria relacionado con la producción de carne cultivada. Este documento establece las bases para una evaluación del riesgo respaldada por datos científicos por parte de las autoridades alimentarias competentes. Además de resumir la literatura clave, el informe incluye casos de estudio nacionales, opiniones de expertos y consideraciones políticas para el futuro.
Se destaca la necesidad de una mayor producción de datos y de compartir información a nivel global entre gobiernos para promover la transparencia y generar confianza tanto en los consumidores como en los diferentes actores del sector.
El informe se centra en cuatro áreas clave: seguridad alimentaria, análisis de riesgos, regulación y terminología.
Seguridad alimentaria de la carne cultivada
Este es el núcleo del informe, que resume los resultados de una consulta realizada por la FAO en noviembre de 2022 sobre los aspectos de la seguridad alimentaria de la carne cultivada. En dicha consulta participaron 24 expertos de 15 países, quienes revisaron exhaustivamente el tema con el fin de identificar los estándares de seguridad alimentaria apropiados y los posibles riesgos asociados a la carne cultivada.
Al evaluar los riesgos potenciales, los expertos coincidieron en que muchos de ellos «ya son bien conocidos y existen en los alimentos producidos de manera convencional«.
Un aspecto importante fue la alergenicidad. Los expertos concluyeron que los alérgenos presentes en la carne y el pescado convencionales probablemente también estarán en las versiones cultivadas de estos alimentos. Esto refuerza la importancia de un etiquetado claro y preciso que refleje el origen de los productos.
Análisis de riesgos
Se analizó cada etapa del proceso de producción de carne cultivada para identificar posibles problemas de seguridad alimentaria y cómo podrían mitigarse o eliminarse. El análisis se centró en la identificación de riesgos físicos, químicos y biológicos.
El panel también revisó y descartó algunas especulaciones más exageradas que se habían hecho previamente sobre la seguridad de la carne cultivada:
- No encontró de que el ADN del animal huésped o los microorganismos presentes en la fase de cultivo pudieran interactuar con el microbioma humano o las células intestinales para causar efectos adversos.
- Tampoco encontraron pruebas de que las líneas celulares inmortalizadas utilizadas en la producción de carne cultivada pudieran provocar la formación de tumores tras su ingesta, y no identificaron ningún mecanismo creíble mediante el cual esto fuera posible.
Regulación
El informe ofrece una visión completa de los avances regulatorios en 10 países y en la Unión Europea, incluyendo un análisisde los casos de Israel, Catar y Singapur.
Estos estudios destacan la importancia del intercambio de información para mejorar la comprensión global de las normativas y las mejores prácticas en torno a la carne cultivada. El informe sugiere que los países deberían empezar a desarrollar marcos regulatorios, dado el rápido crecimiento del sector:
“Considerando los rápidos avances globales en la producción de alimentos basados en células, puede que los países quieran estar bien preparados para contar con los marcos regulatorios, organismos e infraestructuras necesarios para evaluar la seguridad de los productos alimentarios basados en células.”
ASPECTOS DE SEGURIDAD ALIMENTARIA DE LOS ALIMENTOS BASADOS EN CÉLULAS, 2023
Terminología
El informe realiza un análisis sistemático de la literatura científica y las comunicaciones públicas para apoyar a los responsables públicos en la toma de decisiones sobre la terminología adecuada.
Resalta tres términos que se utilizan o prefieren tanto por los consumidores como por la industria: «cultivada», «celular» y «cultural».
Se prevé que los productos de carne cultivada utilicen términos como «carne cultivada» o «pollo cultivado» en su etiquetado para garantizar claridad. En países donde el uso de la palabra «carne» está restringido, la falta de estos términos podría confundir a los consumidores.
El informe también destaca la importancia de etiquetar correctamente los alérgenos, ya que nombres como «salmón» proporcionan información crucial para personas alérgicas. Por lo tanto, garantizar que la terminología sea clara es fundamental para la seguridad del consumidor.
Conclusiones
La publicación de este informe marca un hito, reconociendo el papel que la carne cultivada puede desempeñar en el sistema alimentario del futuro.
Este recurso será fundamental para los responsables públicos y los actores del sector. Es crucial que las autoridades reguladoras establezcan procedimientos sólidos y rápidos para asegurar que los grandes beneficios de este alimento lleguen a los consumidores.