Cómo la nueva Comisión Europea puede aumentar la competitividad de la UE a través de la diversificación proteica

Con la llegada de la nueva Comisión Europea, será esencial abordar un aspecto clave aún poco considerado: la diversificación de las fuentes de proteínas. Este ámbito  podría ayudar a resolver numerosos desafíos que enfrenta la UE.

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Bajo el liderazgo de la presidenta von der Leyen y los 26 nuevos comisarios, el apoyo a la diversificación de las fuentes de proteínas en Europa podría desempeñar un papel crucial para construir un futuro más seguro y fortalecer la competitividad global de la UE. Mediante la promoción de innovaciones en proteínas alternativas —alimentos de origen vegetal, carne cultivada y productos obtenidos mediante fermentación—, los responsables políticos podrían consolidar el liderazgo europeo en tecnologías verdes y desarrollar un sector emergente capaz de generar hasta 9,8 millones de nuevos empleos a nivel mundial para 2050.

Estos alimentos, que requieren hasta un 90 % menos de suelo  en comparación con las proteínas tradicionales, pueden contribuir a aumentar la soberanía alimentaria de Europa. Incluso una leve diversificación del sistema proteico europeo permitiría incrementar la producción local, reduciendo al mismo tiempo la dependencia de las importaciones. Además, al permitir un uso más eficiente del suelo, esta transición ofrecería a los agricultores mayores oportunidades para adoptar prácticas sostenibles en una mayor superficie agrícola útil, contribuyendo significativamente a la reducción de emisiones climáticas —potencialmente hasta un 92 %.

Estos son cuatro ámbitos clave en los que la nueva Comisión puede marcar la diferencia.

Foto de familia del nuevo Colegio de Comisarios. Foto:  Philippe Buissin © European Union 2024
1. Convertirnos en líder en biotecnología alimentaria industrial

Europa, que alberga algunas de las universidades más prestigiosas y centros de investigación de vanguardia, está bien posicionada para liderar el sector de las proteínas alternativas. Sin embargo, los emprendedores europeos a menudo se enfrentan a dificultades para transformar los descubrimientos científicos en innovaciones comerciales.

Esto ocurre especialmente en el sector de la fermentación, una tecnología antigua que hoy evoluciona para crear alimentos innovadores con características similares a los productos de origen animal. Una de las aplicaciones más prometedoras es la fermentación de precisión, que desde hace décadas permite la producción de ingredientes como el cuajo para el queso y que ahora está impulsando el desarrollo de productos lácteos auténticos e ingredientes innovadores.

Sin embargo, la falta de instalaciones de producción a gran escala en Europa amenaza con frenar el desarrollo de estos alimentos, llevando a las empresas a trasladar la producción al extranjero. Mario Draghi, ex primer ministro italiano, ha subrayado recientemente la importancia de traducir el conocimiento europeo en crecimiento económico. Países como China y Estados Unidos ya están invirtiendo masivamente en la diversificación proteica, y Europa no puede permitirse quedarse atrás, como sucedió en el pasado con la movilidad eléctrica y los paneles solares.

Los vicepresidentes ejecutivos Stéphane Séjourné y Teresa Ribera responsables de la estrategia industrial y la competitividad económica, deberían aprovechar esta oportunidad. Invertir en la capacidad productiva de proteínas alternativas debe ser una prioridad en las políticas industriales de la nueva Comisión, incluyendo el la legislación europea en materia de política industrial verde y de biotecnología. Además, reducir el riesgo para las inversiones privadas mediante financiación no dilutiva, préstamos garantizados y normas más flexibles sobre ayudas de Estado podría incentivar el desarrollo del sector. El Banco Europeo de Inversiones (BEI) debería ampliar su cartera y sus herramientas financieras para apoyar este sector en crecimiento.

2. Fortalecer las competencias europeas en investigación e innovación

Aunque en los últimos años los fondos para la investigación en proteínas alternativas han aumentado, especialmente a través del programa Horizon Europe, gran parte de estos recursos no se han centrado en los principales obstáculos que impiden la comercialización de productos.

Con el 10.º Programa Marco en fase de planificación, la Comisión debe garantizar que la innovación alimentaria sea una prioridad estratégica. Esto implica proporcionar financiación que respalde toda la cadena de valor, desde la ideación de productos hasta su comercialización.

Un ejemplo concreto podría ser la creación de una asociación público-privada inspirada en la Empresa Común para una Europa Circular de Base Biológica, que maximizaría los beneficios económicos de la diversificación proteica. Además, establecer convocatorias de investigación específicas permitirían a los investigadores colaborar con productores de alimentos y agricultores a lo largo de toda la cadena de suministro.

Ekaterina Zaharieva, comisaria para startups, investigación e innovación, debería centrar sus acciones en este ámbito en fortalecer las capacidades científicas europeas, cerrando las brechas existentes e incentivando una mayor colaboración entre universidades e industria privada.

3. Garantizar un marco regulatorio claro para los nuevos alimentos

Un marco regulatorio sólido es esencial para garantizar que los consumidores europeos confíen en los nuevos alimentos, como la carne cultivada. Este producto innovador, obtenido a partir de células animales, podría contribuir con hasta 85 mil millones de euros a la economía de la UE y crear aproximadamente 90.000 empleos altamente cualificados para 2050. Antes de poder ser comercializado en la UE, debe ser evaluado en términos de seguridad alimentaria y valor nutricional, según lo establecido en el Reglamento de Nuevos Alimentos, uno de los marcos regulatorios más sólidos del mundo.

Olivér Várhelyi, comisario de Salud y Bienestar Animal, ha subrayado la importancia de mantener a la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) en el centro del proceso regulatorio. Fortalecer la EFSA con recursos adecuados permitiría acelerar las evaluaciones de seguridad y valor nutricional, evitando retrasos burocráticos sin comprometer los más altos estándares de seguridad alimentaria. Además, es fundamental mejorar el diálogo con las pequeñas y medianas empresas para facilitar la presentación de solicitudes de autorización.

4. Permitir que los agricultores aprovechen la oportunidad que suponen los productos vegetales

Europa alberga el mayor mercado mundial de productos vegetales, que están convirtiéndose rápidamente en opciones comunes en muchos países. Este crecimiento ofrece a los agricultores europeos la oportunidad de ampliar el cultivo de legumbres y otros cultivos útiles para la producción de proteínas vegetales.

Christophe Hansen, comisario de Agricultura y Alimentación, ha anunciado su intención de desarrollar una visión holística para la agricultura y la alimentación en los primeros 100 días de su mandato. Basándose en el Diálogo Estratégico sobre el Futuro de la Agricultura en la UE, Hansen debería promover un plan de acción de la UE para alimentos vegetales, fortalecer las cadenas de suministro y garantizar un acceso equitativo a alimentos sostenibles para los consumidores.

Una nueva oportunidad de liderazgo en innovación alimentaria

En definitiva, los próximos cinco años representan una oportunidad crucial para Europa. Invirtiendo en investigación, infraestructuras y normativas claras, la nueva Comisión puede posicionar a la UE como líder mundial en diversificación proteica, asegurando un futuro sostenible y competitivo.